
Primer día de viaje, tras pasar el Rothang La (4000 m)

Royal Enfield Machismo 500 cc, lástima por el nombre porque van de maravilla, una de las mejores Enfield jamás construidas.

Carretera de subida al Rothang La (4000 m)

Conducir estas Royal Enfield de carburación es un auténtico lujo, un placer para los amantes de la conducción.

Al final del primer día, llegamos a Keylong. Ahí encontraremos la última gasolinera hasta que lleguemos a Leh, 365 km más adelante. Eso nos obliga a llevarnos nuestros propios bidones ya que sino no llegaríamos.

Por la mañana del segundo día abandonaremos Keylong y sus paisajes con vegetación, pues durante el día de hoy pasaremos a la «Región alta», donde ya ni la naturaleza puede vivir.

¡Adiós a los verdes de los Himalayas de la India!

¡Hola a sus nieves y picos!

Tras dejar una carretera zigzagueante, encontramos este increíble lago azul turquesa. Los paisajes a estas alturas son impresionantes.

A esas alturas, con todo tan virgen, se produce una increíble mezcla de colores de los distintos minerales existentes, el río, la nieve o la propia hierba que crece tras los deshielos.

La meseta de Sarchu.

Las tiendas en las que paramos a dormir en Sarchu, de bajada, para los que cojan el viaje de 16 días.

Sarchu por la noche.

Comedor del campamento a 4300m de altura.

Tras pasar el control de policía entre los Estados de Himachal Pradesh y Jammu & Kashmir, encontramos a los primeros ladakhis, gente austera y súper acostumbrada a vivir en las alturas.

Justo entre los puestos de control del Estado de Himachal Pradesh y Jammu & Kashmir existe este puente. En ese día, se había roto. Así que nos quedamos todos, camiones, coches y motos, parados esperando a que lo arreglaran.

¡Cosas del azar y viajar! A nuestro grupo le tocó dejar las motos justo en el riachuelo que cruzaba la carretera, a la espera de que arreglaran el puente.

Aprovechando también esos momentos para curar rasguños de una pequeña caída. ¡Es importantísimo no caerse! ya que eso incomoda el viaje. A todos, de una manera u otra.

La subida al Nakee La es una de las carreteras más divertidas del viaje, y sus paisajes son espectaculares.
Fue asfaltada para la temporada del año 2017. Anteriormente, subirla con una carretera llena de tierra, baches y precipicios era toda una epopeya.

Hay momentos en los que lo mejor es parar y observar dónde está uno.

Si no fuera por esos restos de un pequeño templito y sus pregarias al viento, esto podría ser Marte.

Cima del Nakee La que, a pesar de no ser una de las más altas (4800 m), sí es una de las más espectaculares. Llegar ahí es un placer.

Las vistas desde el Nakee La son preciosas, con sus montones de piedras como plegarias budistas. En este ecosistema no suponen un problema, pues no hay vida: ni insectos ni vegetación a la que alterar su existencia. Aquí no es posible la vida.

De camino de la cima del Nakee La a la del Lachung La.
Cima del Lachung La (5144 m). Y la carretera en tierra de bajada se las trae.

Paisajes totalmente marcianos.

Verdaderamente, conducimos por el techo del mundo, por unas carreteras preciosas y con unas motos increíbles.

Al más puro estilo París Dakar, pero en el techo del mundo, por las carreteras más altas. Todo un reto.

Escasos sitios para descansar, tomar algo, hablar del camino. Un descansito siempre se agradece.

Una manera de ganarse la vida a estas alturas y durante la época de verano, pues en invierno es imposible, es llevando piedras con tus burros, para construir carreteras.

Aunque las Royal Enfield no son muy veloces, lo son más que suficiente para este tipo de carreteras.

Llegada a Pang.

Durante la época de verano, familias enteras de gente de Leh (la capital de Ladakh) se trasladan a vivir a las cuatro casitas y tiendas que hay en Pang. Ahí podrán hacer algo de dinero dando cobijo a la gente que pasa por ese maravilloso lugar.

Pang de noche.

Y por fin, con nuestra llegada a Pang, aparcamos las motos y damos por finalizado este segundo largo día de viaje en moto.

Despertar en Pang con este increíble cañón dándote los buenos días es una experiencia inigualable.

Bienvenidos a Marte. Tras la subida de Pang, encontramos la increíbles y maravillosas vistas del cañón, desde arriba. Ahí empieza una planicie que nos conducirá a la carretera que sube al Taglang La, la segunda carretera más alta del mundo.

Carretera de subida al Taglang La (5328 m)

Cima del Taglang La (5328 m), con su templo para oraciones.

Manada de yaks encontrados por el camino Taglang La.

TRas la bajada del Taglang La, ponemos ya rumbo a Leh por una bonita y bien asfaltada carretera. Por ella pasaremos por un cañón donde hay una increíble mezcla de colores rojos, ocres y verdes otra vez, pues habremos bajado a los 350o metros y ya volveremos a ver vegetación.

Leh y un poco de civilización, por fin. Se acaba el tercer día.
El cuarto haremos rafting, al lado de Leh. Iremos con nuestras motos.

Inicio del quinto día, preparándonos para el Khardung La, la carretera más alta del mundo (5690 m), subiendo desde Leh (3500 m)

Vistas desde el Khardung La (5690 m)

Cima del Khardung La, la carretera más alta del mundo.

Vistas desde Nubra Valley, uno de los lugares más recónditos y bellos de la faz de la Tierra.

Nubra Valley.

Ya durante el sexto día, haremos una excursión a la frontera de India con el Tíbet.

En Nubra Valley conducimos por carreteras pegadas al lecho del río, que no siempre están en las mejores condiciones.

Paisajes que cambian por momentos.

Carretera de Nubra Valley a Pangong Lake, que realizaremos a inicios del séptimo día.

El séptimo día es quizás el mejor día de conducción, pues los sitios por los que pasaremos podrían ser tranquilamente Marte si no fuera porque hay construida una carretera.

¡Bienvenidos a Marte!

Posteriormente, bajaremos por un precioso cañón, por una carretera zigzagueante.

Ya casi llegando al Pangong Lake. Las fuerzas cada vez son menores.

Vistas del Pangong Lake, el lago salado más alto del mundo. Y compartido entre India y Tíbet (China).


El Pangong Lake de noche.

La vista de las estrellas desde el Pangon Lake es espectacular.

Octavo y último día de viaje en moto para los que hayan escogido el viaje de 13 días. Durante este día pasaremos por el Chang La (5290 m), la tercera carretera más alta del mundo.